Al prescindir por completo de la leche y productos que la contengan, hacemos que la dieta de una persona intolerante a la lactosa pierda aportes de vitamina A, D, E y calcio.
En un niño estas vitaminas son muy importante para su desarrollo y crecimiento. A las madres siempre nos preocupa muchísimo este tema y más si el niño tiene alguna intolerancia.
Afortunadamente, ya existen en el mercado productos adaptados a personas con intolerancia a la lactosa, que además se encuentran enriquecidos con Calcio y vitaminas.
Hay personas que no son partidarias de productos enriquecidos porque los ven "anti-naturales", entonces ¿qué hacer?. Pues seguir una dieta con las siguientes recomendaciones
Llevar a cabo una alimentación variada y equilibrada, para asegurar que no se produzca déficit de calcio en todos aquellos nutrientes que participan en la composición de huesos y dientes.
Asegurar la ingesta diaria de dos raciones de alimentos ricos en calcio: leche sin lactosa, leche de soja, yogur o queso (según tolerancia). Nota : La raciones dependerán de la edad
Incluir en la dieta algunos tipos de queso como el manchego curado y el roquefort que constituyen una buena fuente de calcio con un mínimo contenido en lactosa.
Incluir otros alimentos ricos en calcio: pescados que se puedan comer con espina (sardinas en lata, anchoas...), legumbres, frutos secos, soja y derivados.
El calcio solamente se usa y es absorbido cuando existe suficiente cantidad de vitamina D en el organismo. Dicha vitamina se encuentra en huevos y pescado. Pescados grasos (salmón, atún, arenque, sardinas - generalmente alimentos abundantes en acidos grasos omega 3)
Alimentos con vitamina E son los cereales, soja, arroz, todos los vegetales de hoja verde( brécol, coles, acelgas, lechuga son también ricos en calcio), panes integrales
Tratar de hacer variada y atractiva la comida incluyendo leche de soja o leche baja en lactosa en la elaboración de numerosos platos: croquetas, bechamel, cremas de verdura, salsas diversas, postres caseros, batidos de frutas y leche, etc.
Cocinar con técnicas que requieran poco aporte de grasas: con agua -cocido o hervido, vapor y escalfado-, rehogado, plancha, horno y papillote.
Utilizar moderadamente fritos, rebozados, empanados, guisos y estofados (desgrasar en frío, ya que mejora su conservación y su calidad nutricional).
Para que la comida resulte más apetitosa se pueden emplear diversos condimentos: albahaca, hinojo, comino, estragón, laurel, tomillo, orégano, perejil, mejorana, pimienta, pimentón, azafrán...
El vinagre y el aceite (oliva y semillas) pueden ser macerados con hierbas aromáticas.
En la elaboración de salsas, los vinos u otras bebidas alcohólicas como ingrediente flambeados pueden hacer más sabrosas diversas recetas.
Atención con los medicamentos, ya que la lactosa se utiliza como bases de más del 20% de los medicamentos con receta y del 6% de los medicamentos sin receta. Sin embargo estos productos sólo afectan a personas con intolerancia severa a la lactosa
Recomendaciones para vida sana sin lactosa
Publicado por
Alicia
at
domingo, 4 de julio de 2010
Etiquetas: recomendaciones vida sana sin lactosa
1 comentarios:
Muy interesante el post y muy buen blog. Seguid adelante con él ;)
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